«Para bien o para mal, cuando eras niño integraste a tus padres dentro de ti»
Cuando somos niños nuestro primer contacto con este mundo y la sociedad es nuestra familia que está compuesta generalmente por nuestros padres, es ahí donde aprendemos las bases que regirán nuestras vidas, aprendemos valores, costumbres, creencias, formas de interacción, en fin es la primera institución donde nos formamos.
Adquirimos las bases de nuestra forma de pensar, de vivir y de socializar, puedes aprender cosas funcionales en tu vida, otras no tanto, puedes crecer con un autoestima elevado, o tal vez creyendo que no vales mucho y que todo lo que haces está destinado a salir mal. Aprendemos por diferentes canales puede ser viendo lo que tus padres hacen, escuchando lo que dicen, sintiendo, imitando, etc..
Cuando crecemos y llegamos a la juventud y escogemos a nuestra pareja simplemente nos dejamos llevar por una serie de cuestiones que hemos hablado en otras ocasiones que son la atracción física, el compartir gustos, tener formas similares de pensar, etc. Pero ¿te has preguntado que influye en el rol que adoptaste en esa relación? ¿Qué influye en la forma en la que te comportas con tu pareja? ¿Qué te impulsa a ser de esa manera?. .
Déjame decirte que también eso lo aprendimos en casa, tenías el modelo frente a ti todos los días durante todos los años que has vivido con tus padres, los viste en su rol de pareja, como se trataban, como se hablaban, que hacían, como se demostraban el amor y así fue en primera instancia como aprendiste que era amor y que era una pareja, tal vez no fue la pareja más saludable o la más amorosa, pero fue lo que aprendiste.
Entonces debes saber que es muy común que repitamos lo que aprendimos, a veces no es de forma consiente, Quizá. te hayas sorprendido alguna vez diciendo: «Acabo de hablar como mi padre.» «¿Por qué estoy haciendo esto?, mi madre (o mi padre, o ambos) solían hacerlo». «Odiaba que ellos lo hicieran y aquí estoy, haciéndolo yo también.»
Desafortunadamente en una relación de pareja esto puede traer conflictos, tratas mal a tu pareja, le gritas, explotas en un conflicto, o simplemente la ignoras, en fin estás repitiendo la misma historia. Esa historia que tanto conflicto te causaba, esa historia que te dolía, esa historia que te hacía llorar, la que odiabas, la que deseabas cambiar, en la que te encontrabas triangulado, la que tuviste que soportar, si esa historia ahora la estás repitiendo.
Aunque dije que desafortunadamente repetimos lo que aprendimos en casa, hay una buena noticia puedes cambiar, romper con esos esquemas que adquiriste y buscar una forma distinta y saludable de tener una pareja. Sólo tu decides cómo ser y cómo manejar tu vida.
Gracias por seguir el Blog Psicólogos en el estado de México, te esperamos con más sobre relaciones de pareja, si te gustó déjanos tus comentarios. De manera personalizada puedes contactarme a: adris_gutierrez@hotmail.com
PSICÓLOGOS EN EL ESTADO DE MÉXICO 
Excelente artículo!!! Somos producto de la historia que nuestros padres» escribieron» para nosotros y de lo que nos transmitieron como modelos de identificación. Y tendemos a repetir bviamente lo aprehendido y con lo que nos identificamos, cuando que en realidad deberíamos poder cambiar la cosas que no nos parecen buenas de esa herencia psicológica que recibimos.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Excelente artículo, agrego que la familia es un lugar donde se aprende a través de modelaje, este puede ser positivo o negativo, pero siempre está la posibilidad de cambio, por el proceso de experiencia, y avnzar en nuestro proceso de evolución
Atte Eduardo Rojas
Me gustaMe gusta
Hola Adriana. Me gustó tu artículo tanto por el contenido en sí como por la claridad con que lo que expones en él. Y por que´no decírtelo… por la buena noticia que el mismo nos deja: es posible cambiar y traspasar la historia de nuestros padres para ser nosotros mismos.
Un saludo afectuoso.
Me gustaLe gusta a 1 persona